Actea / Alejandro Dumas

Este es de los libros que heredé de mi abuela, llevaba un año o así en la estantería esperándome. ¡Una de aventuras!- me dije. De qué irá… Nunca hasta ahora había leído a Dumas, creo que ya iba siendo hora de probar al verdadero maestro de esgrima (sin desmerecer la novela de nuestro Pérez-Reverte), el que creó a los Mosqueteros. Joder, si no fuera por él no habría podido disfrutar con los dibujos de Los mosqueperros cuando era niña. Eran uno, dos y tres los famosos mosqueperros….

Así que puede decirse que ha sido uno de esos libros que empiezas con, incluso, ansia. ¡A ver los espadachines! ¡Las capas! ¡Los callejones oscuros!. Lo que pasa es que no le presté atención al título, que es tal y lo que suena.
Nos remontamos a la época de Nerón, bastante antes que lo de los espadachines. Por aquella eran espadachones del copón, que he visto Spartacus: sangre y arena y sé de lo que hablo.

Total que me he puesto a buscar información sobre Dumas y Actea, para ver qué se había escrito ya sobre ellos y la verdad es que Google no devuelve mucho resultado útil. La mayoría es de venta de libros, no he encontrado ningún sitio donde haya alguna opinión personal. Tampoco es que le haya dedicado horas a la búsqueda, pero para cualquier otro libro de los que busco me aparecen muchos resultados con opiniones. En este caso: fracaso absoluto.
La razón de las pesquisas es que dudo hasta qué punto es ficción o realidad. Buscando por Actea aparece en varios sitios que, efectivamente, fue una amante de Nerón. Nerón es Nerón y el resto de personajes también tienen un origen histórico.
En esta novela se nos presenta a Actea como una chavalilla griega que se enamora de un extranjero que va a Grecia para participar en «los juegos». La novela comienza así:

«El 7 de mayo del año 57 de la era cristiana y 810 de la fundación de Roma, mes llamado por los griegos targelión, salía por la puerta occidental de Corinto, y en direción a la playa, una joven de quince a dieciséis años, alta, preciosa y ágil como Diana cazadora»

Por aquel entonces los juegos constaban de tres únicas pruebas: canto, carreras de cuádrigas y carreras de piernas. Y por cierto, no habían controles de dopaje.
Total, que el coleguita Lucio (así se presenta ante ella y su padre) se la camela pero bien y consigue que la gachí se vuelva con él a su lejana patria, de donde ha venido. Y cuando iban en el barco (de nombre extranjeeero) es cuando la ingenua y frágil Actea se entera de que su príncipe azul resulta ser el César. En concreto NERÓN. Sí, la típica definición de «hombre muy cruel», 5 letras en los crucigramas.

«Por fin, Nerón, volvió de nuevo a Roma, en donde su locura y disolución no tuvieron límite: se celebraron juegos, en los que los senadores lucharon en vez de los gladiadores; concursos de canto en lo que se castigaba con la muerte a los que no aplaudiesen; hubo un incendio en el que la mitad de Roma fue pasto de las llamas, espectáculo que contempló Nerón aplaudiendo y cantando acompañándose de una lira. Popea comprendió que era hora de contener al que había excitado, pues aquellos placeres tan inauditos y tan monstruosos perjudicaban su influencia. So pretexto de su embarazo se negó a ir al teatro un día en que Nerón iba a cantar; esta negativa mortificó al artista; habló a Popea como emperador, ella resistió como favorita, y Nerón, impacientado, la mató de una patada

Cuando la jamba se entera de quién es el notas que se la ha llevado allende los mares, le da un vahído. Pero es que a esas alturas del libro (ná, lo que es ná) ya se ha desmayado como 5 veces y otras tantas que le quedan. Pa mí que tiene anemia, hipoglucemia o algo asín, pero la chavala está muy mal. Se desmaya mazo veces. Supongo que lo que pone Dumas al principio de ágil es compatible con débil.
Total, que de repente se encuentra en Roma y se da cuenta de que es una concubina del emperador. Otros personajes protagonistas son Agripina (la madre de Nerón)

«-Ya ves, hijo mío, que no nos apartamos de las condiciones prescritas, puesto que el número de los invitados no debe ser inferior al de las Gracias ni superior al de las Musas, si se ha de creer a uno de nuestros poetas…»

o el apóstol Pablo.
«Actea miraba asombrada a Pablo. ¿Quién era aquel anciano que con voz dulce y firme al mismo tiempo daba órdenes y era obedecido como un rey y respetado como un padre? ¿Había acaso en el mundo dos emperadores, y el que se ocultaba era quizá más poderoso que el otro?
(…)
-¿Quién eres, señor, para que todos te obedezcan sin demostrar temor?
-Ya te lo he dicho, hija mía: me llamo Pablo y soy apóstol.
¿Y qué es un apóstol? -replicó Actea-. ¿es un orador como Demóstenes? ¿Es un filósofo como Séneca? En mi patria la elocuencia está representada por unas cadenas de oro que le salen por la boca. ¿Encadenas tú a los hombres con tu palabra?«
Hasta aquí puedo leer en cuanto a la trama.
Se lee de un tirón y pasan cosas continuamente, vamos, que da gusto. Y además contiene: peleas en el circo (te las imaginas perfectamente), leones, catacumbas cristianas, conspiraciones, veneno, brujas…
Recomendado!

«Debajo de una ciudad, aquellas catacumbas eran otra ciudad. La existencia de la tierra, de los pueblos y de los hombres tienen una gran semejanza: la tierra tiene sus cataclismos, los pueblos sus revoluciones, el hombre sus enfermedades; todos pasan por la infancia, la virilidad y la vejez; su edad difiere en su duración, y nada más; la una cuenta por millares de años los otros por siglos, los últimos por días«

2 comentarios en «Actea / Alejandro Dumas»

  1. eSTOY LEYENDO aCTEA, GRACIAS POR TU COMENTARIO, Y TAMBIÉN, COMO EMPUJÓN PARA COMENZAR (O NO) A LEERLO) BUSQUÉ ALGUN COMENTARIO Y ME TOPÉ CON EL TUYO. ME DECIDÍ A LEER LA NOVELITA Y PARECE PRECIOSA… EN DOS SESIONES LLEGUÉ AL CAPÍTULO 11! lO RECOMIENDO, LIGERA LECTURA, PERO MUY BUENA A LA VEZ…

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